TÍTULO: COMO SE UNE UN ESPÍRITU A UN BEBÉ; EL CORDÓN MATERNAL; VIAJES Y EXPERIENCIAS DE LOS ESPÍRITUS CUANDO DECIDEN IR A PROBAR VIDAS MATERIALES.-

Sí hijito; este dibujo celeste explica que toda la naturaleza viviente posee cordón solar; la madre que espera fruto posee infinitos cordones solares; los de ella y los del Bebé; cada porito de su cuerpo de carne tiene un cordón; el espíritu igual; cada virtud de las 318 que posee el pensar humano, tiene también su cordón solar; es así como está unido el todo sobre el todo del universo expansivo pensante del Padre Jehova; hasta los microbios conocidos y desconocidos poseen su cordón que los unen a los soles; cada elemento de la creación tiene su cordón; los platillos voladores y los planetas igualmente; porque nadie es desheredado; nadie es menos ante el Padre; en el dibujo se ven líneas y cuadrados; significa que todo principió por un puntito que se expandió en forma lineal; fué la primera geometría que tuvieron las moléculas terrestres; y todo elemento de la naturaleza, es la extensión del puntito; la línea representa el círculo y la espiral; porque en toda geometría no deja de ser línea; la espíral retrocediendo hacia el pasado, pasa por línea y llega al punto de partida; y toda figura geométrica retrocediendo en el tiempo, vuelve a su orígen; vuelve a ser punto; y más allá del punto está la figura mayor; los soles que crearon el punto de orígen; y si un sol retrocediera en su evolución, pasaría igualmente por lo mismo; círculo, linea y punto; ir a probar vidas a lejanos planetas, es para el espíritu como ir a un puntito; todo planeta del tamaño que sea, es llamado punto geométrico desde el Reino de los Cielos; después del Padre, nadie es mayor; todo infinito es relativo frente al infinito mismo; todo espíritu es llamado cuando debe nacer de nuevo a la vida; y al llamado concurren tantos, que oscurecen los soles del macrocosmo; son muchos los llamados y pocos los elegidos; porque todos desean ir a los mundos más avanzados; y para lograrlo deben ser bienaventurados; los salvos deben ir a mundos que le designa la Trinidad; el bienaventurado, él mismo elige el mundo; la reencarnación es la entrada de un espíritu a la carne; es nacer de nuevo a la vida de la carne; porque antes había estado; porque todo espíritu nace de nuevo; y la primera carne que tuvo todo espíritu, fué carne gaseosa; y ante de esa primera carne, era una inocencia solar; un querubín de fuego; era físicamente como una perla brillantísima; y su mundo eran los mares de leche de la Madre Solar Omega; quiere decir que la inocencia tiene sus universos vivientes; y uno de los más sublimes premios para todo espíritu, es visitar sus universos de orígen; su lugar de principio; cuyo color es de cielo Blanco; todo espíritu que a visitado la galaxia de la inocencia, pierde el conocimiento ante tanta belleza; y esa impresión le acompaña por muchas exsistencias; cuando un espíritu debe venir a la vida, se le dá a conocer todo su destino; y se le permiten ciertos cambios en él; siempre que esto esté dentro de su sal de vida; la sal de la vida, es el conocimiento ó experiencia que tiene cada espíritu; y mientras más trabajador y activo fué un espíritu, mayor en cualidad y calidad es su sal de vida; mejor cuerpo para un mejor mundo tendrá; los seres que van a los mundos y se dejan ilusionar por placeres y comodidades que ningún mérito espíritual tiene, poseen una sal de vida, muy pobre en lo moral; y lo más seguro es que vuelvan al mismo mundo, donde instantes antes estuvieron; es lo que les sucederá a todo flojo y perezoso de la Tierra; a todos los que perdieron su tiempo en modas sin ningún valor espíritual; la importancia en que se deja influenciar todo espíritu, también es juzjada en el Reino; y todo aquél ó aquélla que dió a la moda importancia para sobresalir en la vida, no entrarán al Reino de los Cielos; porque además de condenarse en lo moral, hacen caer a otros que les imitan; cuando un espíritu se está por unirse a un bebé, se forma en torno de él, un puntito que se vá alargando; es el Cordón Solar ó Maternal; es un cordón fluídico y expansible; y el espíritu se siente ligado a él; vislumbra un lejano puntito que es la Tierra; más, para llegar a ella, debe atravesar infinitas galaxias; ve escenas que nunca había visto; y a medida que pasa el tiempo, siente el espíritu en grado mayor, la influencia del puntito llamado Tierra; se vé introducido en una dimensión desconocida; siente que la alegría que sintió en el Reino de los Cielos, se vá alejando; se vá apagando; nuevos y desconocidos mundos aparecen ante él; de vez en cuando vé brillar algo que le recuerda en forma vaga, a los gigantescos vehículos plateados; son los platillos voladores que desde distancias inauditas, le acompañan y le observan; tal como en la Tierra se cuida a un bebé; lo de arriba es igual a lo de abajo; y cuando se acerca el instante en que debe entrar a la vida desconocida, un olvido total se apodera de él; la apatía más grande entra en él; se está acercando al otro extremo del cordón; y presiente que ya se encuentra en el puntito; hasta siente ruídos; ignora la causa; vé ríos y océanos de sangre y agua; vé los huesos de la madre como gigantescas montañas; ve vacíos y precipicios; vé inmensos fuegos; vé la electricidad del cuerpo de carne de su madre terrenal; conversa con microscópicas criaturas, que le estaban esperando; como la llegada de un gran profeta; en que sus propios elementos de bebé, serían para estas microscópicas criaturas, infinitas leyes de estudio; tal como un profeta entre los hombres, trae nuevas revelaciones; lo que sucede en lo microscópico, sucede en lo macro; lo de arriba es igual a lo de abajo; en vuestro ser interior suceden hechos parecidos a lo exterior; tenéis microscópicas dimensiones; y vuestro exterior es lo de arriba para esas criaturas; el espíritu llega al cuerpo de su madre por el cordón solar; todo el tiempo que dura un embarazo, es todo un infinito para el espíritu; que viene atravesando infinitas dimensiones; hasta aparecer en la dimensión terrenal; y mientras dura este viaje, sus moléculas se van cohesionando con las moléculas del presente humano; el espíritu entretenido en las dimensiones que atraviesa, no se dá cuenta de como se vá formando su presente terrenal; es por esta causa que nadie recuerda las experiencias que pasó en el vientre de su madre; y el espíritu, viene a saberlo cuando la cohesión es total; cuando se vé y se siente encerrado en una geometría de carne; en todo instante se cumple el olvido del pasado; que es la causa mayor de la prueba de la vida; toda vida es un pedido que tiene su cualidad y calidad; y la característica de la vida humana, es el olvido de su propio orígen; porque precisamente está probando una vida; y al probar una vida, pidió condiciones; por lo tanto la falta de conocimiento de vuestro pasado, es causa salida de vosotros; vosotros lo pedísteis; y se os concedió; y se os dió libre albedrío dentro del olvido mismo; la prueba de la vida se inició después de la desobediencia de Adán y Eva; y durará hasta que la doctrina del Cordero de dios, sea comprendida por toda la generación; porque así lo pedísteis; tenía que ser la espíritualidad viviente, la que traería nueva luz al mundo; el materialismo es una filosofía planetaria y limitada; y su pronta caída marcará su fín; el materialismo explotador, es la legión de admiradores de satanás; porque en el Reino todos los espíritus tienen libre albedrío; pueden ir donde gusten; y este libre albedrío, los lleva a visitar grandes sabidurías; y es así que los espíritus explotadores se sintieron atraídos por los seguidores del maligno; y fueron ilusionados sus espíritus; cayeron en una debilidad, dentro de la propia evolución; por lo tanto la causa de los sufrimientos del mundo, se debe a debilidad humana; una debilidad que tiene por cualidad y calidad, la astucia y la ambición; estos demonios fueron los que se tomaron la libertad de crear el dinero; y con ello dividieron a todo el género humano en ricos y pobres; sólo satanás se divide así mismo; la prueba de la vida que pedísteis, no debió ser tan injusta y dolorosa como es; por estos demonios del capitalismo es que lleváis el yugo de la injusticia; por estos demonios, ninguno de vosotros entraréis al Reino; porque también os ilusionaron; la cualidad y la calidad de vuestro pensar, fué inferior a la cualidad y calidad de la moral de mis Mandamientos; fuísteis entretenidos en una falsa filosofía instante por instante; segundo por segundo; y basta la violación de un segundo, y no se entra al Reino de los Cielos; estos demonios de la explotación se condenaron ellos y condenaron al mundo; por causa de ellos es el llorar y crujir de dientes de la humanidad; que fué guíada por una legión de ciegos; que hizo de esta humanidad, otros tantos ciegos; ciegos guías de ciegos; que heredan la debilidad moral y la ignorancia; todos salísteis del Reino muy felices; aún aquéllos que tenían que pagar grandes deudas; y deberíais regresar con la misma alegría; que es la virtud permanente del Reino de los Cielos; si así no ocurrió, dadles las gracias a vuestros ciegos guías de ciegos; creadores de la ciencia del bién; del bienestar que aleja de la moral del Padre; más, de verdad os digo que si vosotros los ciegos, los que os dejásteis guiar por estos demonios, sóis castigados, ellos lo serán mil veces más; quiere decir mil veces más por cada porito de sus cuerpos de carne; cada porito de carne representa una justicia en que cada uno de ellos, representa mil exsistencias en las tinieblas; si esta humanidad pecó, una tercera parte de su causa, se debe a estos demonios de la explotación; que no es lo mismo que pecar por causa propia; hasta el más microscópico influyente de cada pecado, es juzjado; los grandes del mundo, al no renunciar a sus puestos terrenales viendo tanta injusticia, no entrarán al Reino de los Cielos; más aquéllos pocos que lucharon y luchan por defender los derechos de los humildes, salvos son; porque toda medida es medida en el Reino; con la vara que se midió, al defender una justicia; la justicia del Padre está en todo lo que se piensa; porque está en todas partes; todos los cordones solares que unen las naturalezas a los soles, poseen sus leyes instantáneas de justicia; es así que cuando ocurre un terremoto, temblor ó maremoto, las moléculas de los elementos vivientes, claman y se quejan; tal como gime vuestro espíritu; porque lo de arriba es igual a lo de abajo; lo que ocurre en un instante dado en vuestro presente, está ocurriendo en ese mismo instante en microscópicos presentes; en infinitas dimensiones; lo del espíritu repercute en la materia; y lo de la materia repercute en el espíritu; cuando ocurre un temblor, su causa sale de la Tierra; sale de la materia; y el espíritu se llena de pavor; porque infinitos cordones solares que salen de su espíritu y de su carne, vibran en un extremo; mientras que el otro está unido a las moléculas de los elementos de la Tierra; he aquí la causa del todo sobre el todo en la sensibilidad entre materia y espíritu; es por eso que cuando mi Hijo Primogénito expiró en la cruz, toda la Tierra tembló y el sol se oscureció; la vibración de un Primogénito Solar, es una superioridad divina en el resto de las jerarquías de los elementos vivientes; todos lloraron a su Creador; el que les ordenaba amorosamente; el que mandó los vientos calmarse; porque había una comunicación telepática y permanente entre espíritu y materia; en la creación del Padre exsisten leyes conocidas y desconocidas; lo que hasta hace poco era desconocido, ahora es conocido; siempre ocurre igual; toda ley llega al conocimiento cuando debe de llegar; porque también son probadas en sus leyes; porque no exsiste ley sin ley; toda ley es un pedido viviente que está escrito en el Reino; como está escrita la brisa que os acaricia; El Cordón Maternal es un cordón que tiene dentro de sí, a trillones y trillones de otros cordones; todos se juntan en uno sólo; el todo sobre el todo; el magnetismo amoroso los une; a la partida del espíritu de la Tierra, tienden a separarse; porque han cesado sus obligaciones con el cuerpo físico; son tan libres como el espíritu mismo; más, como poseen libre albedrío y moral, muchos por amor y obligación de costumbre, se quedan con el espíritu; este cordón era representado por los malditos faraones, por una trenza; y era a la vez símbolo de telepatía viviente; desde pequeños los hijos del Faraón, se caracterizaban por esta costumbre; el pueblo de israel, solía llamarle el mechonero; estas costumbres como sus creadores, fueron cortadas en el Reino de los Cielos; porque estos demonios del mundo antiguo, fueron maldecidos por el Padre Jehova; una historia que cautivará al mundo; sucesos desconocidos por el conocimiento humano; hechos que muy pronto se conocerán; sólo la telepatía viviente del hijo, os descorre vuestro pasado; ninguna ciencia humana, puede explicar su propio orígen; porque pidió como ciencia viviente, olvido del pasado; esta revelación provocará inmensa polémica entre el materialismo y la espíritualidad; entre los que están encerrados en un sólo presente, y los que piensan en infinitos presentes; una polémica intelectual entre Oriente y Occidente; entre los que sirven a las virtudes y los que sirven al oro; entre los que prefirieron en sus pruebas de vida, servir a la eternidad y los que prefirieron servir al mundo; oro y mundo; virtud y eternidad; he aquí el Alfa y la Omega, de todas las psicologías humanas; en que todos pidieron un juicio final; y la luz final; de como se hicieron las cosas; dos pedidos que empiezan a cumplirse; en el mismo instante que lo pedísteis; probados fueron muchos hijos que pidieron recibir en sus exsistencias, la Revelación; con ellos se cumplió el deseo; más, todos sin excepción alguna, despreciaron el pedido; y despreciaron su entrada al Reino de los Cielos; porque ese premio les estaba reservado; el divino Padre no ruega a nadie; más, dá oportunidad; el mundo conocerá en todos los idiomas, el nombre de los que le despreciaron; porque así lo pidieron en el Reino, ellos mismos; en caso de faltar a su promesa; quien desprecia a un humilde que habla en el nombre del Padre y que tiene pruebas, al Creador que le a enviado, desprecia; y quien desprecia al Padre, desprecia su destino en los mundos de la luz; sólo les queda el llorar y crujir de dientes.-

Escribe: ALFA Y OMEGA.-