Significa que toda divina Revelación salida de tí, hijo divino, estremecerá todo el conocimiento humano; pues nadie puede permanecer indiferente, tratándose de su propio porvenir espíritual; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; significa que todo conocimiento salido del Padre, repercute en cada divino espíritu, de su propia creación; pues escrito está, que el divino Padre Jehova es el único creador de cuanto exsiste; pues nadie puede llegar en su propio perfeccionamiento, a superarlo; es divina ley del común progreso; el divino amor del Creador, no se mide en riquezas pasajeras; se mide en divinas eternidades; que están por sobre toda humanidad terrestre; sí hijo divino; así es; ninguna adoración material me complace; sólo me complace el divino trabajo honrado; y la divina comunidad de los pasajeros intereses; pues satanás se vale de la maldita ilusión, ó ciencia cómoda del bién; a él le convenía que la divina Eva comiera del fruto prohibido; que no es más que la maldita filosofía del dinero; sí hijo divino; así es y así será hasta la total caída de este pasajero árbol filosófico; significa que mi divina justicia remecerá los intereses de todo explotador; empezando por las naciones más ricas; cuyo engrandecimiento ha sido a costa del sufrimiento y explotación de mi divino rebaño; sí hijo divino; así es; tal como tu divina mente lo piensa; esos viajes espaciales, producto de la divina inteligencia, son producto de la misma explotación de mis divinos hijos; pues ese colosal dinero gastado en ello, bién podría utilizarse en alimentar a millones de mis hijos, que padecen desnutrición; cuya causa es el mismo materialismo, en su ambición maldita, por dominar por sobre todos los demás; aún pasando por encima de mis divinos Mandamientos; sí hijo divino; así es; juzjados serán; pues de su propia eternidad, les será descontado; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; significa que toda gloria terrestre, eclipsada será, ante tu infinito poder de Padre Solar; pues ninguna criatura humana, querrá ser mortal; todas pedirán ser divinamente resucitadas; más, serán premiados, los que se lo merecen; los que han cumplido con mis divinos Mandamientos; es decir los que han trabajado; los que jamás han escandalizado; los que jamás han explotado en ninguna forma imaginable a mis humildes hijos; pues mi divina palabra no manda explotarse unos con otros; mi divina palabra manda convivir sin intereses pasajeros; manda convivir como hermanos de una misma familia planetaria; no manda convivir en medio de diferencias sociales; ni en medio de orgullos pasajeros; me refiero hijo divino, a las malditas noblezas; cuya maldita filosofía, ya recibió su maldita recompensa; sólo le espera, el llorar y crujir de dientes; pues, avisados estuvieron estos espíritus orgullosos; y vanidosos; no sólo por mis divinas leyes, que son todo amor; sino que también fueron divinamente advertidos, en los lejanos soles, antes que sus microscópicos espíritus reencarnaran en sus respectivos cuerpos; sí hijo divino; así fué y así será por los siglos de los siglos; todas las llamadas cortes de reyes, no serán resucitados en nueva carne; pues la maldita filosofía pensante de estas criaturas, es filosofía demoníaca; pues sólo la soberbia reina en ellos; la misma maldita soberbia, conque satanás se rebeló a mí, en la divina morada; ¡pobres criaturas! vagarán por el mundo, sin patria alguna; serán mirados con infinita compasión; nadie en el mundo les dirigirá la palabra; nadie querrá ser contagiado, con los divinos querubínes de la maldición; pues llegó, la divina hora de la divina justicia; y el divino destino que cada cual se labró, según sus propias acciones; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; ¡que diferencia, hijo divino, el gozo divino, de que disfrutarán, todos los obreritos del Señor! de los que han sido eternamente explotados; de los que han sido esclavos del egoísmo, de los demonios del maldito dinero; pues escrito está, que mis humildes, serían los primeros, en el nuevo mundo, que ya se está divinamente forjando; pues al escribir telepáticamente y divinamente, tu Santísima Trinidad, está formando los divinos querubínes pensantes, con la nueva filosofía; pues, se sabrá todo, lo que el hombre ha ignorado por siglos y siglos; sí hijo divino; tú eres el Alfa y la Omega; es decir el primero y el último; es decir el primero en dar el divino soplo solar, conque nació el planeta Tierra; y el último en dar al mundo, la única y eterna verdad; verdad divina que identifica al planeta Tierra, con el resto de los mundos, de que está formado mi divino universo expansivo pensante; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; sí hijo divino; así es; las multitudes te alabarán, como jamás fué alabado hombre alguno; reconocerán en tí, al verdadero fruto; al divino corderito, de sus propias inocencias; sí hijo divino; así es; tal como tú divina mente lo piensas; eso significa que los humildes y mansos de corazón, serán los primeros en viajar hacia el infinito, en mis divinas naves plateadas; pues eso significa entrar primero en el Reino de los Cielos; escrito está, que sólo los humildes serían ensalzados; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; significa que las naves plateadas aterrizarán el divino año 2001; pues ya se habrá cumplido, todo lo que escrito estaba; sí hijo divino; toda divina escritura, se reduce a un sólo divino Mandamiento: Adorarás a tu Creador como a tí mismo; significa que toda la grandeza humana, no es nada en divina comparación, con el infinito amor de tu Padre Jehova; pues, la divina resultante de ese divino amor, son los infinitos mundos materiales; que no son más que una de las infinitas dimensiones, que la criatura humana es capaz de ver; sólo alcanza a ver una microscópica parte de mi divina creación; pues mientras más se evoluciona, más se expande el universo expansivo pensante; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; significa que todas lasnaciones se aprestarán a formar un sólo gobierno universal; el mismo que han enseñado por siglos, mis divinas escrituras; lástima, hijo divino, que el maldito dinero, retrasó por veinte siglos, este divino acontecimiento; pues yo, tu divino Padre Jehova, sólo planté un divino árbol filosófico: El divino trabajo; el único que dá poder, para alcanzar mi divina añadidura; que es la misma divina resurrección de la propia carne, con divina y nueva filosofía pensante; filosofía de niño; la misma que reina en los infinitos soles; de donde tú, hijo divino, salístes momentáneamente, para juzjar a un planeta Tierra; un planeta de divinos monitos, que muchas veces sueñan, llegar a ser, grandes dioses de sabiduría infinita; y sin darse cuenta muchas veces, que sus divinos pedidos son escuchados por infinitas inteligencias que actúan en diferentes dimensiones; sí hijo divino; así es; ellos forman infinitos pueblos, galáxias y universos; que viven dentro de la misma dimensión humana; ellos ven, oyen y aprenden de la sabiduría, de lo que ellos llaman, dioses humanos; pues ellos, eternidades más adelante también serán sabidurías humanas; pues también soñaron y desearon llegar a ser grandes dioses; pues la divina aspiración de cada criaturita pensante, se materializa, no como un simple y divino deseo; sino que también se materializa en infinitas galáxias, cosmos, universos; pues es la misma divina espíritualidad, la divina autora de los infinitos mundos materiales, que quedan saturados con la respectiva filosofía, del divino y primitivo ser; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; significa que la llamada fantasía mental humana, es una sublime realidad en las infinitas galáxias; pues basta pensar en un divino algo, y ese algo, se materializa en el espacio y en el tiempo, del infinito; el mismo espíritu, pulsa, su propia expansión pensante; pues, escrito está, que eterno es; esta divina expansión jamás cesa; pues las infinitas filosofías, son divinos semilleros, conque el divino Padre Jehova, forma el divino polvo cósmico, de cada mundo; es por eso, hijo divino, que escrito está: Del polvo eres y al polvo volverás; es decir, que un determinado planeta, por gigantesco que sea, no es más que un microscópico puntito, ante mi divina presencia; y si ojos humanos, vieran el infinito conjunto de estos puntitos, que son los colosales planetas, verían sólo una divina extensión de polvillo; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; pues te diré, hijo divino, que todo ser pensante, salió de los infinitos soles; y los mismos soles, también desaparecen ante mí; pues ninguno de ellos logrará alcanzarme jamás, en divino brillo de sabiduría; pues yo, tu divino Padre Jehova; fuí hace ya infinitas eternidades atrás, lo que ellos son ahora; fuí también del polvo; fuí humilde y pequeñito; fuí, lo que mis divinos Mandamientos ordenan para mis hijos terrestres; que se están perfeccionando, para llegar a ser, divinos dioses de sabiduría infinita; sí hijo divino; he leído tu divina mente; escrito está que sólo exsiste un sólo Dios nomás; y ése es tu divino Padre Jehova; pero, no lo olvides, hijo divino, que un Padre desea lo mejor para sus hijos; y yo, tu divino Padre Jehova, deseo en mi divino libre albedrío, que mis hijos, que son mi eterna creación, lleguen a ser, lo que tu divino Padre Jehova fué y será; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todo se alcanza en la eternidad creadora; significa, que cada espíritu en su divina acción, es su propio constructor, de su propia eternidad; pues, te diré, hijo divino, que no exsiste eternidad alguna, que no haya costado sudor de frente; no exsiste nada regalado; hasta tu divino Padre Jehova, ha pasado por las infinitas reencarnaciones que en estos momentos, sus hijos pasan; y no sólo de los hombres, sino que de cada mundo en particular, de los que han habido, hay y habrán; pues soy preexistente a todo; lo que la divina mente pueda imaginar; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; es por eso, hijo divino, que ningún rico entra en mi santo reino; pues la filosofía del rico, es desconocida en los lejanos soles; donde sólo reina la divina filosofía angelical; la divina filosofía de niños; sí hijo divino; el mundo ya fué avisado también de esto; cuando tú, hijo divino, en tu divina reencarnación como Jesús de Nazareth, lo dijiste: Dejad que los niños vengan a mí, porque de ellos es el Reino de los Cielos; sí hijo divino; así fué y así será hasta la divina resurrección de toda carne y la divina transformación, de toda filosofía pensante; pues escrito está, que todo árbol filosófico que no ha plantado tu divino Padre Jehova, de raíz será arrancado; significa que mis divinas escrituras, fueron divinamente concebidas, para que cada uno de mis hijos, gozara de mis divinas leyes, de toda la creación; para que tuviera un gozo de niño; sí hijo divino; así es; la maldita ambición de unos pocos, frustró este divino destino, al planeta Tierra; me refiero, hijo divino, al maldito árbol, que tu divino Padre Jehova, no ha plantado jamás; el árbol de la maldita filosofía de la riqueza; pues, son estos demonios de la ambición, los causantes de todo el dolor, que ha padecido el planeta Tierra, en todas sus épocas; sí hijo divino; así es y así será hasta la divina exterminación, del yugo de la humanidad terrestre; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; por estos demonios de la ambición, fué escrito el llorar y crujir de dientes; pues con su maldito dinero, producto de la maldita explotación, sobre mi divino rebaño, no podrán comprar la divina eternidad; pues mis divinos querubínes, no conocen esa maldita debilidad, de ciertos espíritus humanos; sí hijito; así es y así será hasta que el vendaje del egoísmo se les caiga; esto ocurrirá en medio del llorar y crujir de dientes; de todos los llamados grandes del mundo; de escandalosos artistas; de los malditos reyes; de los grandes magnates; de los malditos fabricantes de armas; de la maldita ramera; símbolo maldito de la roca del egoísmo humano; de los malditos que han perseguido y aún persiguen a mis divinos hijos, porque no les gusta el divino color de su piel; de los que escandalizan con su maldito vestir estrafalario; de los que se abandonan con malditas modas; de los que atropellan su propio sexo; de las que han escandalizado con sus propios cuerpos; de los que del amor, han hecho un maldito negocio; de las que se unen en divino matrimonio una y otra vez; atropellando mis Sagrados Mandamientos; de los que explotan el divino sexo; de los que sin importarles, la divina presencia de los niños, escandalizan de infinitas maneras; de los que comercian con el divino sexo, en todas sus formas; de los que han perturbado, la divina mente de mis hijos, con intrigas y falsedades; de los que han violado mi divino libre albedrío, diciendo que el divino comunismo es un demonio; sí hijo divino; todos estos demonios que se rebajan con el divino trabajo, lágrimas de sangre llorarán; maldecirán mil veces haber nacido; maldecirán las malditas riquezas, que tantos placeres pasajeros les brindaron; sí hijo divino; así es; por ellos se escribió el llorar y crujir de dientes; no serán resucitados; el mundo no les dirigirá la palabra; pues nadie querrá contagiarse con los divinos querubínes de la maldición; sí hijo divino; así es; también por estos demonios se escribió: Muchos serán los llamdos; más, pocos los escogidos; pues de todos mis obreritos del divino trabajo, no todos son limpios; han sido corrompidos por las costumbres, de la maldita derecha; símbolo maldito de maldita explotación, sobre la divina izquierda; sí hijo divino; así es; también por estos demonios de la explotación, fué escrito: Que no sepa la izquierda, lo que hace la derecha; significa la maldita tentación del dinero; significa que no se debe probar de ese fruto filosófico; significa que es mejor cortarse las divinas manos, antes de tomar dinero maldito; significa que no se debe probar jamás de la maldita ciencia del bién, producto de la maldita filosofía de los ricos; que en ninguna morada celestial, tienen la entrada; pues deben expiar toda violación a mi divina palabra; sí hijo divino; así es; tal como tu Santísima Trinidad, te lo ha puesto en tu divina mente: Estas divinas nuevas, ocurrirán apenas seas dado a conocer al mundo, por tus honorables Dalai-Lamas; ellos ya te han identificado; están radiantes de felicidad; más, cultivan la divina serenidad; por algo hijo divino, ellos se aislaron del podrido materialismo; se alejaron por siglos de la ciencia del bién; que brinda pasajeros placeres, a cambio de la pérdida del alma; pues las acciones del mundo materialista, jamás han gustado, a los divinos querubínes de la divina eternidad; son ellos hijo divino, los divinamente encargados, de resucitar toda carne; de la divina carne, cuyo espíritu, no tenga nada de que avergonzarse; sí hijo divino; así es; todo soberbio se cierra él mismo, su propia eternidad; ningún divino querubín del infinito universo expansivo pensante, le tenderá la mano; pues ellos tampoco desean contagiarse de los efluvios que se desprende de una criatura maldita; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; sí hijo divino; así es; el divino Isaías lo dijo: Multitud de muchos pueblos que gemirán pidiendo perdón; pidiendo clemencia; más, todo se cumplirá, como divinamente fué anunciado, por mis divinos profetas; pues ellos, hijo divino, también poseían la divina Telepatía; en diferente grado según la divina misión de cada uno; la divina telepatía, se conoce en el mundo celeste, como el divino Cantar de los Cantares; pues en mis divinas moradas solares, los niños-ángeles lo cantan en mi divina alabanza; todos ellos son divinamente telepáticos; también conversan, usando divinos idiomas; pero más usan el divino Cantar de los Cantares, que tuvo el divino David; pues por divina telepatía le inspiré; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; todos mis hijos tienen el divino gérmen telepático; toda la naturaleza lo posee; hasta los indebidamente llamados animales la poseen; te digo indebidamente, hijo amoroso, porque yo, no creo animales; yo creo hijos; hijos con iguales derechos; nadie en mi divina creación es menos ante mí; los que ahora son animales, según el falso concepto humano, mañana serán espíritus humanos; pues mi divina herencia es igual para todos; esto significa que el divino comunismo se encuentra en toda mi divina creación; así lo enseñan mis divinas escrituras; no exsiste diferencia original, entre un divino microbio y un espíritu humano; pues todos tienen un mismo punto de partida; y por lo tanto un mismo destino; lo que los hace diferentes, es la relativa posición en sus respectivos espacios y tiempos; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todos renacen de nuevo; siendo en determinada exsistencia, una determina especie; ó si se quiere una criaturita; al renacer de nuevo, significa que reencarna de nuevo; es decir vuelve de nuevo a la vida planetaria; las divinas reencarnaciones, se llevan a efecto en los lejanos soles; correspondiendo al género humano, los divinos soles Alfa y Omega; cuya divina filosofía representa la divina acción; ó si se quiere, el divino trabajo; representan divinamente, el principio y el fín de todas las acciones materiales pasajeras de la humanidad terrestre; sí hijo divino; así es y así será por toda eternidad; es por eso, hijo divino, que siendo tú, el divino Jesús de Nazareth, en el pasado terrestre, lo anunciastes diciendo: Soy el Alfa y Omega; el principio y el fín de las cosas materiales; esto significa que tú, hijo divino, eres un divino juez solar; pues siendo el divino Cristo, tuvistes otra divina psicología en tu propia reencarnación; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que cada espíritu es lo que no era antes; pues la divina individualidad cambia a medida que el espíritu renace en nuevos cuerpos; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; es por eso hijo divino, que cada criaturita es más ó menos apta para determinada misión en la vida reencarnada; te digo más ó menos apta, porque la Tierra no es un mundo de la categoría de los planetas perfectos; la Tierra pertenece a un mundo de monitos imperfectos; siendo todavía de carne, sujeta al dolor y la muerte; porque has de saber hijo divino, que en la interminable categoría de mundos, exsisten planetas de monitos perfectos; ellos, no son de la carne; pero pasaron por ella; pues escrito está, que hay que ser chiquitito y humilde, para ser grande en el Reino de los Cielos; sí hijo divino; se levanta el divino velo del divino orígen de la criatura humana; todos mis hijos llevan en sus cuerpos físicos, la Santísima Trinidad; es la divina corriente eléctrica que circula por sus cuerpos; corresponde a una divina trillonésima de una trillonésima, de línea magnética solar; y ésta a la vez, es infinitamente expandible; es aquí hijo divino, donde nacen todas las exsistencias materiales; que sólo necesitan la unión amorosa de los cuerpos físicos; pues toda divina sensación repercute en los lejanos soles; donde es muy divinamente común preguntarse entre los divinos Padres Solares; ¿quién me ha tocado? pues ellos viven el divino tiempo celeste; donde un divino segundo celeste, corresponde a un divino siglo terrestre; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto no significa hijo amoroso, la única escala de los tiempos materiales celestes; las divinas equivalencias van hasta el infinito; los tiempos son, según los mundos; son, según las divinas evoluciones de cada uno; sí hijo divino; así es; así como hay infinitos mundos, así también exsisten infinitos tiempos y espacios; y jamás se revuelven entre ellos; me refiero hijito, a sus divinos libres albedríos; pues como ya te lo he dicho, mi divina herencia es igual para todos; tanto la infinita materia como el eterno espíritu, tienen ambos su divino libre albedrío; nadie jamás ha sido menos; sí hijo divino; así es; muchas criaturas, consideran difícil que la materia tenga vida; los tales, olvidan en primer lugar, que nada es imposible para el Señor; caen luego en cierto grado de egoísmo, basado en la incredulidad y la falta de ilustración; pues ni saben lo suficiente ni de su propia vida física; sí hijo divino; así es; el materialismo ha contribuído en sumo grado, para que estas criaturas, no profundicen mis divinas leyes de la eternidad; eternidad divina, que todos poseen; sí hijo divino; así es; es por eso que estas criaturas, renegarán de sus propios padres; cuando vean, llenos de pavor, lo que les espera; por haber sido incrédulos; las más de las veces, por errónea y falsa enseñanza de sus propios padres; que haciéndose llamar modernos cristianos, niegan mi infinito poder; niegan por comodidad; no se dan el trabajo de buscarme; pues, las comodidades, de la ciencia del bién, han hecho presas en ellos; olvidándose que nada es imposible para el Señor; tarde reaccionarán; tendrán que sufrir el llorar y crujir de dientes; pues escrito está, que todo cuesta en la vida; nada es regalado; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; sí hijito; así es; el divino Isaías, veía el futuro; veía los seres humanos, llenando plazas y playas; los veía detrás de tí; trataban de tocarte para ser salvos; pues por tí mismo hijo divino, empieza todo arrepentimiento; pues todo lo que siente la humanidad, se lo debe a tí; pues todos fueron hechos por tu propia y divina voluntad; fueron hechos por tus divinos fluídos solares, entre los soles Alfa y Omega; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todos los seres humanos, probados serán; como tú, hijo divino, también fuístes probado; pero triunfastes, sobre el mal; pues todo lo que sufristes hijo divino, todo se sabrá; tus humildes hermanitos, que todo lo presenciaron, todo lo narrarán; sí hijo divino; así es; tu Santísima Trinidad te ilustra una vez más; la divina prueba por la que pasastes, corresponde a tu propio brote telepático; corresponde a una divina prueba, que tú, hijo divino, la pedistes en los lejanos soles, antes de reencarnar en tu actual cuerpo; fué una sublime prueba de Primogénito Solar; ó bién, Primogénito Jehova; pues escrito está, que tu divino Padre Jehova, está en todas partes; aún en los infinitos soles; sí hijo divino; así es; debes cuidarte de esas malditas jerarquías faraónicas; ellos saben de tu divina misión; ellos fueron los que trataron de engañarte, con tus primeras escrituras; yo, tu divino Padre Jehova, los observaba; los dejé hijo divino, para que tú, hijo amoroso, ganaras divina experiencia; pues luchastes por tres meses, contra el maldito dios osiris; padre maldito del maldito materialismo terrestre; no pudo contra tí, hijo divino; ni podrá jamás; escrito está, que la maldita serpiente faraónica, se arrastrará a los pies del Señor; y escrito está también, que jamás satanás podrá contra tu divino corderito de tu divina inocencia solar; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todos los estudiosos de mi divina palabra, no te dejarán jamás; para ellos, tú eres el más sublime premio, que criatura alguna, pueda recibir; pues, lo que es del Padre, es también del hijo; lo que hace el Padre, lo hace el hijo; sí hijito así es; por el fruto se conoce el árbol; cuando tu divina Ciencia Celeste, que es tu divino fruto intelectual, haya transformado al mundo, el mundo comprenderá, lo que es la infinita grandeza de una Santísima Trinidad; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa también, que muchos serán los llamados por tu divina escritura telepática; por tu divina intelectualidad; más, pocos serán los escogidos; pues no hay, quien no tenga, divinas deudas, con tu divino Padre Jehova; siendo la primera, la maldita roca del egoísmo humano; la gran ramera que no ha titubeado, en comerciar con mis divinas leyes; sí hijo; es la misma; es la secta vaticana; es la misma llamada iglesia católica, por mis inocentes hijos; que creen aún en ella; pues, llegó la divina hora de la santa verdad; llegó la divina hora, de la verdadera espíritualidad; la que quebrará la maldita roca del egoísmo, de los que se han hecho llamar, representantes de Dios en la Tierra; sí hijo divino; así es; maldecirán mil veces, su maldito egoísmo; pues jamás han querido a mi divino rebaño; sólo han querido las malditas riquezas, de los malditos reyes y ricos de este planeta Tierra; sí hijo divino; así es; igual suerte les espera a las malditas cortes supremas de justicia terrestre; pues son los causantes, del dolor de mis humildes hijos; estos demonios han hecho de la justicia, un maldito negocio; un maldito lucro; maldecirán mil veces, haber sido falsos jueces, en un maldito mundo; cuyo sistema de vida, sigue siendo la maldita explotación del hombre por el hombre; sí hijito así es; no es el planeta el maldito; lo son los creadores, de la maldita filosofía de la explotación; explotación que jamás cesará; mientras no sea un divino Dios Solar, el que juzje a su propia divina creación; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todos mis divinos enviados, son salidos de los lejanos soles; a donde se llega, sólo con la divina pureza del divino corderito; cuyo divino símbolo es la divina humildad; sello divino, que caracterizó a todos mis divinos profetas; pues ellos siempre lo han querido así; han querido complacer mi divino libre albedrío; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; significa que todos los niños del mundo, te adorarán; pues tu divina doctrina convierte en divina realidad, la divina fantasía infantil; pues ella es una sublime realidad en los lejanos soles; todo niño siente y vive, lo que en los lejanos soles vivió; su divina mente está saturada aún de la divina filosofía infantil solar; sí hijo divino; así es; la divina filosofía de niño, es de los infantes de dioses; pues con la debida y divina experiencia de sus propias reencarnaciones, se convierten en su propio dios de sabiduría, en su propia filosofía; sí hijo divino; así es; los llamados genios de tu mundo, son espíritus con divino fruto filosófico, ya maduro; ellos han ganado divina experiencia, en sus infinitas reencarnaciones; han cumplido con mi divina ley: Te ganarás el pan, con el sudor de tu frente; sí hijito; así es; quien niega la divina ley de la divina reencarnación, se niega a sí mismo; pues niega su propio progreso galáctico; niega su propio fruto; se cierra él mismo, la divina puerta que conduce a mi divina morada; reniega de las infinitas moradas, que mi divina creación le ofrece para su infinito progreso por las lejanas galáxias; sí hijo divino; todo lo sé; sé Hijo Primogénito que la maldita roca niega el divino progreso de mis hijos; pues excomulga, a quien cree que nada es imposible para el Señor; muchos han sido perseguidos por estos demonios; que se creen exclusivos en la divina verdad; sí hijito; así es; un divino y humilde obrerito vale infinitamente más que ellos; porque es temeroso y respetuoso de mi divina palabra; es por eso que ellos, los humildes obreritos, son los primeros ante mí; de ellos será el nuevo mundo; donde manará leche y miel; pues así está divinamente escrito; los humildes y mansos de corazón, serán glorificados por tu divino Padre Jehova; sí hijito; para ellos serán las delicias, de los primeros viajes al cosmos infinito; en las deslumbrantes naves plateadas; pues para visitar los lejanos mundos, hay que ser del divino corderito de la divina inocencia; hay que estar limpios de toda mancha de pecado; que no son más que violaciones pasajeras, frente a mis divinos Mandamientos; pero aún, con ser pasajeras, representan una eternidad en mi divina añadidura; a que tienen derecho cada uno de mis hijos; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; significa que sólo después de la divina resurrección de toda carne, podrá la humanidad terrestre, viajar al infinito; y te diré hijo divino, que no necesitarán, esos imperfectos implementos y trajes espaciales; pues las divinas naves plateadas se amoldan a toda infinita dimensión; ya sea del macro, como del micro- cosmos; ellas se asimilan mediante sus propios fluídos solares; entran y salen entre los infinitos mundos; tienen maravillosas leyes magnéticas solares de infinita expansión y contracción; es decir se hacen invisibles; pues estas divinas naves son de la misma divina escencia primitiva, conque fueron hechos los mundos que visitan; ellos están saturados de la primera y divina materia cósmica, conque fueron hechos los mundos materiales, de la divina categoría terrestre; sí hijo divino; así es; exsisten universos materiales, con diferentes leyes, muy distintas a la materia conocida por el hombre; pues te diré hijo divino, que cada infinita molécula de cada grano de arena de tu planeta, no es igual a otro; aunque parezca serlo; pues no exsiste un divino libre albedrío, igual a otro; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; sólo los divinos libres albedríos de la Santísima Trinidad, se asimilan a uno sólo; y eso hace posible la infinita exsistencia de toda infinita creación; entre ellas, los universos materiales conocidos por el hombre; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que son las divinas individualidades de las lumbreras solares, las que se materializan en todos los mundos; ellos, mis hijos solares, todo lo convierten en divinas virtudes; es decir materializan sus propias ideas, en infinitas filosofías pensantes, en constante é infinita expansión; pues mi divina añadidura sobre mis hijos solares, constituye la eternidad misma; ellos han creado, crean y crearán, desde el divino instante en que tu divino Padre Jehova, dijo: Hágase la luz, y la luz fué hecha; sí hijo divino; así es y así será por toda eternidad; esta divina partida de creación infinita, no empezó con una sóla filosofía; tuvo infinitos principios amorosos-filosóficos; las diversas formas que tienen las divinas individualidades humanas, en sus propios procederes, es resultado de su propio orígen solar; el divino Padre Jehova no es absoluto en determinada filosofía; es infinito en todo; por lo tanto, la exsistencia humana, jamás ha sido la primera; ni jamás llegará a serlo; pues eternidades antes de ella, ya habían pasado por el espacio, gigantescos mundos terrestres; que no eran más que microscópicos mundos, ante otros colosales, que estuvieron antes que ellos; y así hijo divino, remóntate hasta donde tu divina mente, pueda imaginar; es por eso hijo divino, que exsiste un divino espacio que es infinito; junto con un infinito tiempo; pues ambos son divinamente inseparables; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todo mundo no es el principio de mi divina creación; pues mi divina creación, es infinitamente expansiva; es decir que un mundo en particular, dá lugar a una eternidad, que ninguna fuerza puede parar; es por eso que nadie es más grande que aquél que es divino autor de toda divina é infinita creación; sí hijo divino; así es; tal como lo veo en tu divina mente; la ciencia terrestre se multiplica según sus propias fuerzas; en cambio, mi divina añadidura es la creadora eterna, del orígen de esas fuerzas; producto de la divina inteligencia; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todo ser humano juzjado será según el uso que hizo de su divina inteligencia; pues mi divino Mandato, es el divino perfeccionamiento de la divina intelectualidad; sin la cual, no exsistirían los infinitos premios, que otorga mi divina añadidura; sí hijo divino; así es; nadie escapa a la divina justicia; y es así hijo divino, que los primeros espíritus que encarnaron en los primeros períodos de la Tierra, serán divinamente juzjados por el Antiguo Testamento; pues así fué divinamente escrito, en los lejanos soles; y la actual generación de espíritus terrestres reencarnados, serán divinamente juzjados por el divino Nuevo Testamento; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; mi divina justicia es para todos igual; la diferencia está, en el divino grado de evolución de cada uno; pues, las primeras criaturas de la Tierra, tenían otro concepto de mi divino amor; para ellos, el matar era sinónimo de progreso; se destruían mutuamente; sí hijo divino; así es; la actual generación sabe que matar es malo; y quien lo haga, maldito es; pues sólo al divino Padre Jehova, le incumbe el destino de cada espíritu; sí hijo divino; así es; el matar incluye todas las malditas formas de hacerlo; hasta los malditos asesinatos, basados en los malditos orgullos nacionales; pues, lágrimas de sangre llorarán, los malditos autores de estas demoníacas filosofías; que no son árboles plantados por tu divino Padre Jehova; y de raíz serán arrancados, de la evolución humana; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todos están avisados, desde el divino momento, en que tú, hijo divino, seas presentado al mundo; por tus honorables Dalai-Lamas; pues empezará la divina justicia, maldiciendo, al yugo del planeta; que es la maldita fuerza de las malditas armas; la que es malditamente bendecida, por la maldita roca del egoísmo humano; la llamada iglesia católica; que para tu divino Padre Jehova, no es más que una secta; pues comercia como una vulgar ramera, mis divinas leyes; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; esto significa que todo soldado deberá meditar mucho, antes de tomar un maldito fusil; pues en ello le vá su propia eternidad espíritual; pues desde el mismo divino instante, en que te lea, hijo divino, le empieza a correr el divino puntaje celeste, de la divina justicia; y ésta, está divinamente relacionada con la divina resurrección de su propia carne; pues avisados están; como igualmente los llamados periodistas; no deben emplear las comillas, al referirse a tu divina justicia; pues las comillas simbolizan la incredulidad, sobre las grandes verdades; simboliza el maldito materialismo de la ciencia del bién; quien lo haga, maldecido será; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos; avisados estáis, hijos periodistas; no cometáis el maldito error, de falsear la divina verdad, como se viene haciendo desde tiempos inmemoriales; todos sóis mis divinos hijos; no juguéis, con vuestra propia eternidad; como han jugado, los que se atrevieron a explotar a mis humildes hijos del divino trabajo; sí hijos divinos; así es y así será por los siglos de los siglos; sé hijo divino, que estos divinos mandatos, confundirán a los grandes de la Tierra; pues no hay fortuna alguna, que no haya violado mi divina palabra; todas son maldito producto de la maldita ciencia del bién; de la maldita ambición humana; sí hijo divino; así es; la divina Eva, fué la primera en violar mi divina ley; por ella, el mundo ha pasado por la divina prueba espíritual, de la tentación; pues toda herencia, se transmite a los hijos; divino destino de toda criatura principiante; de la divina imperfección; por la que han pasado, hasta los mismos padres solares; pues escrito está, que para ser grande en el Reino de los Cielos, hay que ser chiquitito y humilde, en los mundos materiales; sí hijo divino; así es y así será por los siglos de los siglos.-
ESCRIBE: ALFA Y OMEGA.-